Los alumnos de 6º de Primaria del Colegio Villalkor se han convertido esta mañana en diputados por un día, en la Asamblea de la Comunidad de Madrid. Allí han asistido a un pleno en el cual han podido votar por el mismo procedimiento que realizan los diputados autonómicos.
Organizado por Aldeas Infantiles de España y con la colaboración de la Asamblea de Madrid, el programa “Abraza tus valores”, dirigido a la etapa de Primaria e Infantil, persigue educar personas con sólidos valores que sepan reflexionar y emocionarse para crear un futuro donde todos demos lo mejor de nosotros mismos.
Nuestros alumnos han dado lectura a la redacción elegida, que versaba sobre la igualdad y la presentación de nuestros compromisos como colegio con respecto a ella».
Una vez en el Parlamento, dos de nuestros alumnos han dado lectura a la redacción elegida, que versaba sobre la igualdad y la presentación de nuestros compromisos como colegio con respecto a ella.
La educación en valores es uno de los pilares fundamentales sobre los que se sustenta el proyecto educativo del Colegio Villalkor, que a lo largo del curso desarrolla distintas iniciativas enfocadas a educar alumnos responsables, solidarios y que participen de la vida social dentro de la tolerancia y el respeto por el prójimo.
Y esta es la redacción que leyeron con las propuestas de nuestros alumnos:
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| ¡Hola amigos!
Con esta historia quiero hablaros de la importancia de la igualdad y el respeto entre las personas. Era el primer día de clase y llegaba un niño nuevo al cole. Su nombre era Pedro. Tenía una sonrisa muy bonita y parecía muy simpático. Muchos niños se acercaron a él para preguntarle cosas, pero cuando Pedro les contestó, algunos empezaron a reírse y otros se fueron. Pedro era tartamudo y con los nervios le costaba mucho hablar. La mayoría de sus compañeros le rechazaban por eso y pasaba mucho tiempo solo. Además siempre había un grupito en el patio que se burlaba de él. Pedro se sentía muy triste. Una tarde, en clase, la profesora de Lengua mandó escribir una redacción y después pidió un voluntario para leerla. Pedro, echándole mucho valor, se ofreció a leerla y lo hizo muy bien. ¡Era magnífica! Dejó a casi todos los compañeros sorprendidos, la profesora lo felicitó y todos le aplaudieron. Ese mismo día, en el recreo, una niña muy simpática de su clase llamada Sara, se acercó a hablar con él y se hicieron amigos. Ella le contó que todos los años había un concurso de cálculo en el colegio y como a Pedro le gustaban las mates, decidió apuntarse. Llegó el día del concurso, Pedro se había preparado muy bien, acertó todas las respuestas y ganó el concurso. Una vez más dejó sorprendidos a todos. Poco a poco fue haciendo amigos, él era un chico muy especial. Al final de curso, con la entrega de diplomas, Pedro fue premiado y aplaudido por todos sus compañeros. Los niños que se habían portado mal con él, se arrepintieron y le pidieron disculpas. Esta historia demuestra qué es lo que realmente importa de las personas; no son los rasgos ni las aptitudes, sino su interior. COMPROMISOS: Me comprometo a:
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